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El colágeno es una de las proteínas más abundantes de nuestro cuerpo, y representa un 6% de nuestro peso corporal. Está formada por varias cadenas proteicas que se disponen formando una triple hélice, constituyendo las fibras que componen los tejidos. Las principales células encargadas de la síntesis del colágeno son los fibroblastos. Estas cadenas proteicas están formadas mayoritariamente por aminoácidos como glicina, prolina, hidroxiprolina y arginina; interviniendo elementos como el zinc, el cobre y el silicio.

¿EN QUÉ TEJIDOS SE ENCUENTRA? Y ¿CUÁL ES SU FUNCIÓN PRINCIPAL?

Existen distintos tipos de colágeno:

- Fibras de colágeno tipo I: forman parte de la piel, musculatura, ligamentos y tendones.

- Fibras de colágeno tipo II: presentes sobre todo en el cartílago, articulaciones y en el humor vítreo del ojo.

- Fibras de colágeno tipo III: abundante en el tejido epitelial, en vasos sanguíneos como las arterias y en el intestino.

La función principal del colágeno es aportar fuerza y elasticidad al tejido conjuntivo presente en los distintos órganos del cuerpo. Además, interviene en la formación de membranas que cubren órganos como la pleura, vasos sanguíneos, tracto digestivo, corazón...


Con la edad, la formación de colágeno se deteriora y pierde grosor y elasticidad.

¿QUÉ FACTORES INTERVIENEN EN LA PÉRDIDA DE COLÁGENO?

Radicales libres: factores como fumar o los rayos UV por la exposición solar, favorecen la producción de estas especies químicas, que contribuyen a la destrucción del colágeno.

- Edad: con el paso de los años, disminuye su producción, principalmente por una menor estimulación hormonal.

- Hábitos dietéticos: una dieta demasiado rica en azúcares daña el colágeno. Es importante llevar a cabo una dieta rica en minerales, vitaminas y aminoácidos, que contribuyen a aumentar su formación.

- Estrés y pocas horas de sueño: altos niveles de cortisol provocan directamente la destrucción de las fibras de colágeno. Dormir menos horas de las necesarias, también provoca una disminución de su producción, puesto que mientras dormirmos es cuando más colágeno sintetizamos.

¿QUÉ SUPLEMENTOS ESTIMULAN SU PRODUCCIÓN?

En general, los suplementos que contienen mezclas de péptidos y aminoácidos (arginina, prolina, glicina), los minerales zinc, silicio y cobre; así como las vitaminas A y C. Estas sustancias estimulan la hormona del crecimiento, que a su vez aumenta la síntesis de colágeno.

¿QUÉ TIPO DE COLÁGENO EMPEZAR A TOMAR?

Esta cuestión siempre va a depender de la persona y del efecto que queramos conseguir.

- Tipo I: al ser el mayoritario en el organismo, siempre va a ser beneficioso tomarlo.

- Tipo II: el de elección si queremos mejorar un problema articular o cartilaginoso.

- Tipo III: en el caso de que queramos mejorar la flacidez de la piel, junto con el colágeno de tipo I. En la mayoría de los productos comerciales nos encontramos con combinaciones de colágeno tipo I y III.

¿Cómo y a qué hora tomarlo?

Es aconsejable no ingerirlo con otros alimentos, especialmente con proteínas, para facilitar la digestión que realizan nuestras enzimas. En función del resto de componentes de la fórmula, será preferible tomarlo por la mañana o por la noche. Si la fórmula no contiene ingredientes que puedan alterar el sueño, lo normal es tomarlo por la noche, ya que es el momento de mayor producción de colágeno en nuestro organismo.